De momento apunta todo a que este puede ser otro buen año para la colza. Las primeras siembras -las de antes de que lloviera- están “excepcionales”, según indican en Semillas Blanco. Las de después -entre unas y otras lluvias- están más desiguales.
No ha helado todavía y hay humedad. “La implantación en los secanos va a ser buena”, prevén. En Valladolid se ha sembrado algo menos, pero en provincias como Burgos y Palencia sí hay más hectáreas de colza.
“Las colzas están todas bien”, coincide la técnica de Dekalb Laura O. Saster. “Pero, a la vez, muy desiguales según las parcelas. Están diferentes en función de la fecha de siembra y de si han tenido opción a riego de nascencia”, añade.
Ahora, los que sembraron sin abono, que para la experta de Dekalb es un error si el agricultor quiere ayudar a que el cultivo se implante bien, ya debiera abonarlas. Y sobre todo estar pendiente de las malas hierbas para que no se hagan grandes e incontrolables. “En Dekalb hemos comprobado que nuestra nueva genética nace mucho mejor y sobre todo con más vigor”, recalca.
Esta campaña hay pocas posibilidades de que las colzas sufran con las heladas de invierno debido a la humedad ambiental y en el terreno.