La situación de los incendios forestales, sobre todo en Galicia, Castilla y León, Extremadura y Asturias, sigue siendo muy grave. Las pérdidas millonarias que han causado estos fuegos todavía son estimaciones. Personas que han perdido sus hogares, ganaderos y agricultores que han visto arder su medio de vida, y aunque la bajada de las temperaturas de los últimos días, ha dado un cierto respiro, muchos focos siguen aún activos.
Las zonas afectadas por los incendios serán declaradas zonas catastróficas a lo largo de estos días, lo que llevará con ello la adjudicación de indemnizaciones y ayudas.
Agroseguro ha estimado indemnizaciones de 3 millones de euros debido a la superficie afectada, que, a estas alturas, cuenta con más de 19.000 hectáreas. Estas cifras superan las que se quemaron en el año 2022, que fue el peor de los últimos 6 años y que cerró con 15.371 hectáreas afectadas. Por lo que 2025 será con total seguridad el año con mayor superficie siniestrada por incendio en explotaciones agrícolas y ganaderas desde 2020. Hay que tener en cuenta que aún hay un buen número de incendios activos en este momento, por lo que esa cifra previsiblemente continuará creciendo.
¿Qué cubren los seguros agrarios en caso de incendio?
Todos los productores asegurados cuentan con protección frente a este riesgo dentro de la garantía básica de cualquier póliza, tanto por daños en la producción como a la plantación, indican desde Agroseguro a Revista Campo. En el caso del cereal, esta protección también se extiende a la producción que se haya podido ver afectada por la creación de cortafuegos preventivos.
Asimismo, el seguro agrario también ofrece cobertura de los daños que hayan podido sufrir las cabañas ganaderas aseguradas a causa del fuego.
Respecto a los datos sobre los seguros ganaderos, desde Agroseguro nos indican que están recibiendo partes fundamentalmente correspondientes al seguro de retirada. Sobre todo, de aviar, equino y ovino-caprino, aunque los incendios están teniendo menos incidencia sobre la cabaña ganadera.
En cuanto al origen del incendio, al asegurado no le afecta si es o no provocado. El productor asegurado cobraría la indemnización correspondiente y en caso de que se determine que el incendio ha sido provocado (y se encuentre al culpable) se realizarían los trámites pertinentes para que las aseguradoras pudieran recuperar esa indemnización.
Proceso que tiene que seguir el asegurado
Los pasos a llevar a cabo en un siniestro cuando se tiene contratado el seguro agrario es similar a la de otros seguros. Una vez constatado el siniestro, se pone en contacto con su mediador de seguros o entidad aseguradora para comunicarlo. El parte de siniestro llega a Agroseguro (gestor del seguro agrario) y desde allí preparan la tasación de los siniestros de las que se encargan peritos profesionales independientes para que realicen la valoración de los daños.
Una vez valorado el daño se inician las gestiones administrativas para el abono de la indemnización. La media actual (informe anual de Agroseguro del año 2024) se sitúa en 25 días desde la tasación definitiva del siniestro para los seguros agrícolas y 27 días para los ganaderos.
Hay que recordar que el seguro agrario no es obligatorio, lo contrata el agricultor y ganadero que lo consideran oportuno. En cualquier caso, a lo largo de los últimos años, la evolución de la contratación de seguros agrarios es positiva. La mayor o menos contratación depende de muchos factores tales como, la realidad climática, la sensación de riesgo del productor o el grado de profesionalización, entre otros.