Una completa mesa de debate, con representación de todos los eslabones de la cadena, analizó el presente de la situación de los regadíos con las aguas subterráneas, al mismo tiempo que reflexionó sobre los retos a los que ha de enfrentarse el sector. José Joaquín Gómez, de CUAS Mancha Occidental destacó la importancia de la constitución de las CUAS “anticipándose a las situaciones y problemas que pueden surgir”.
Asimismo, señaló la importancia de la interlocución “entre todos los actores y en todos los sentidos: regantes, comuneros y las distintas administraciones tanto locales como internacionales”.
Diego Hernández, agricultor de Villarmentero de Esgueva (Valladolid), ha explicado que la situación del Valle del Esgueva “hemos pasado de una zona de regadío, con remolacha, a una zona de secano”. “Los cuatro que seguimos apostando por el regadío hemos invertido mucho en mejoras (bombas, placas solares) ahora tenemos dos problemas. El primero es que no nos dejan crecer. Nos limitan el crecimiento a nivel personal y como agricultores. En segundo lugar, está el tema de la concesión, que puede reducirse a la mitad”, se lamentaba Hernández.
La industria agroalimentaria necesita agricultores detrás para funcionar. Así lo ha afirmado Juanma Coello, director de Operaciones de Patatas Meléndez. “Nuestros planes de expansión se ven muchas veces limitados porque no encontramos agricultores que puedan crecer y eso nos preocupa mucho”, se lamentaba. “Debemos tomar buenas decisiones en torno al agua porque en un tema tan clave nos estamos jugando el futuro. Nosotros estaremos siempre al lado del productor”, añadía Coello.
No solo la agricultura debe afrontar los problemas relacionados con el agua, también la ganadería se ve afectada. “En el sector, tenemos que poder crecer y hacer proyectos a medio y largo plazo, no solamente en el tema del agua, sino también en el tema de las dimensiones de las explotaciones ganaderas. Aquí necesitamos la ayuda de la administración”, explicaba Sonia Rodríguez, propietaria de la ganadería Sociedad Cooperativa Vazaeco, en de Todehumos (Valladolid).
Desde su condición de ganadero, el diputado provincial Fernando Esteban ha denunciado que la ganadería “se criminaliza demasiado”.