Más de 500 socios de las cooperativas integradas en Bureba Ebro participarán los días 14 y 15 de junio los campos de ensayo en los que la entidad mostrará las pruebas realizadas en variedades de cereal, fertilización y sanidad vegetal.
Luis Alonso, del equipo técnico de la cooperativa, apunta que el objetivo es trasladar al socio la experiencia realizada con variedades de cereal que pasarán al catálogo de la entidad a medio plazo.
También se analizará el comportamiento de tratamientos y fertilizantes en la comarca, además de abrir el abanico a cultivos alternativos al cereal, muchos de los cuales han demostrado buena capacidad de adaptación a la zona, en la que prima la rotación de trigo, cebada y girasol.
Uno de los cultivos con horizonte más optimista es el de la colza.
En Quintanaloranco se conocerán las experiencias con herbicidas para trigo de hoja ancha y para trigo de hoja estrecha.
En Fuentebureba, por su parte, se ha organizado un macrocampo de ensayo en el que se han ensayado 20 variedades de colza, diez de guisantes en microparcelas, una de garbanzo y diferentes microparcelas de trigo, avena, triticale, cebada de invierno y cebada de primavera.
Los socios de las cooperativas que forman Bureba Ebro también podrán conocer la experiencia de un campo de abonado de cobertera y uno de fungicidas para trigo.
Entre las propuestas más innovadoras, también se visitará un campo de ensayo en el que se ha probado un bioestimulante que incorpora bacterias que toman el nitrógeno de la atmósfera y lo trasladan a la planta.
El objetivo es ayudar al agricultor a cumplir una normativa sobre el aporte de nitrógeno cada día más estricta.
