La reciente propuesta de la Comisión Europea para el próximo Marco Financiero Plurianual (2028-2034), que plantea un recorte significativo y una profunda reestructuración de la Política Agrícola Común (PAC), ha provocado una respuesta unánime y contundente por parte del Ministerio de Agricultura español y las principales Comunidades Autónomas. Todos cierran filas para defender una PAC fuerte y con financiación adecuada.
La posición del Ministerio
El ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación, Luis Planas, ha expresado el rechazo de España a la dilución de la PAC y a los recortes propuestos. Aunque reconoce la necesidad de mayor flexibilidad para los estados miembros en la gestión de fondos, insiste en que la PAC debe mantener su carácter común y su financiación específica.

En declaraciones recogidas por Efeagro, el ministro ha mostrado su «sorpresa y rechazo» por esta toma de posición «inicial» de la Unión Europea, pero ha reiterado su «disposición a intentar mejorar en todo lo posible» dicha propuesta. Luis Planas ha asegurado que irá «a tope» para mejorar la propuesta presupuestaria de Bruselas en lo que atañe al sector agroalimentario y ha recordado que es ahora cuando comienza la negociación.
¿Y las comunidades autónomas?
Las comunidades autónomas, cruciales en la gestión de los fondos de la PAC a nivel regional, han manifestado su rechazo frontal y sin paliativos a la propuesta de la Comisión Europea. Consideran que estos cambios pondrían en grave riesgo la viabilidad de sus modelos agrarios.
En Castilla y León, el presidente de la Junta, Alfonso Fernández Mañueco, rechazó «con contundencia» el «rumbo que está tomando» la negociación de la nueva Política Agraria Común. «Rechazamos cualquier recorte presupuestario, rechazamos que se diluya en un fondo único y rechazamos que pierda la singularidad de apoyo al campo, al sector primario», sentenció.
Además, añadió que «estamos y estaremos al lado de las organizaciones agrarias para conseguir una PAC con un presupuesto fuerte, robusto e individualizado, sobre todo, que defienda las necesidades reales de nuestro campo y que garantice la viabilidad y la rentabilidad de las explotaciones agrarias»», añadió.

El martes de la semana que viene se convocará el Consejo Regional Agrario, donde los representantes del sector y la consejera del ramo, María González Corral, tendrán la oportunidad de analizar esta primera parte de la reforma, sobre la que se debatirá los próximos dos años.
Desde Galicia, la Consejería de Medio Rural ha alertado sobre el grave perjuicio que supondría para su modelo agrario, caracterizado por explotaciones familiares y una fuerte presencia de los sectores lácteo y cárnico. La conselleira, María José Gómez, ha mostrado su «honda preocupación» ante esta cuestión y «la necesidad de una PAC fuerte y con un presupuesto que garantice la rentabilidad de los agricultores y ganaderos gallegos».

El Gobierno de Castilla-La Mancha califica de “traición total al campo europeo” el recorte contemplado en el presupuesto de la próxima PAC. El consejero de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural, Julián Martínez Lizán, ha lamentado que la presidenta de la Comisión Europea haya olvidado las manifestaciones del año pasado, “cuando hablábamos de un problema burocrático; si ahora le vamos a sumar un problema de falta de liquidez en las explotaciones, en no garantizar la viabilidad de los pueblos y la supervivencia de la economía rural, mal empieza este nuevo periodo de programación”.

Desde el Gobierno de Aragón, el consejero Javier Rincón ha calificado la propuesta de «absolutamente inasumible» y ha añadido que «nosotros hemos defendido que el sector agrario es estratégico y esto puede poner en serio riesgo nuestra agricultura y a sus profesionales». La medida afectaría no solo a los ingresos de más de 33.000 agricultores y ganaderos aragoneses, sino también a la cohesión territorial, a la seguridad y soberanía alimentaria y a la sostenibilidad económica de todo el entorno agroalimentario aragonés.

Andalucía, la comunidad que más fondos de la PAC recibe en España, ha sido especialmente crítica. El presidente de la Junta, Juanma Moreno, se ha mostado así de tajante: «me da igual quién lo haya propuesto, pero ya digo que nos oponemos tajantemente a cualquier recorte a nuestros agricultores, a nuestros ganaderos y a nuestros pescadores, rotundamente».

Moreno, que ha recordado que es copresidente del Comité de las Regiones de la UE, ha indicado que aunque ello haya sido impulsado por «compañeros» del Partido Popular Europeo, «hay cosas en las que no estamos de acuerdo y las decimos alto y claro».
En esta misma línea se mostraba el ejecutivo de la Región de Murcia: «No aceptamos que se reduzcan las aportaciones a los profesionales del sector agrario, una actividad necesaria y sin la cual no podemos vivir, son los que llenan nuestras despensas», señaló el portavoz, Marcos Ortuño. Por este motivo, desde esta adminsitración van a pedir al Gobierno de España una «reunión urgente y extraordinaria» de la Comisión Sectorial de Agricultura para «adoptar una posición firme en Bruselas ante esta propuesta de reducción de fondos para el sector agrario y reivindicar un cambio de rumbo».

La postura unánime de las administraciones españolas refleja la profunda preocupación por el futuro de la PAC y la necesidad de asegurar un apoyo adecuado y estable para el sector agrario español frente a los desafíos que se plantean desde Bruselas.