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sábado, octubre 5, 2024
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Diputación de Valladolid e INEA se unen para impulsar los cultivos alternativos

Jesús Julio Carnero pone de relieve la importancia de “avanzar en la búsqueda de nuevos cultivos incidiendo en factores importantes como la rentabilidad, la creatividad, la tecnología y la innovación”

El presidente de la Diputación de Valladolid, Jesús Julio Carnero, y el director de INEA, Escuela de Ingeniería Agrícola, Félix Revilla, han inaugurado hoy la Jornada sobre Cultivos Alternativos que se enmarca dentro del convenio suscrito entre ambas instituciones para la puesta en marcha de un programa de desarrollo de cultivos alternativos en la provincia de Valladolid en la que han participado agricultores, estudiantes e innovadores interesados en encontrar nuevas líneas productivas que les permita establecerse en el medio rural.

En su intervención en el acto inaugural el presidente de la Diputación de Valladolid ha destacado la importancia del sector agroalimentario en el estructura productiva de la provincia de Valladolid, “un sector clave por lo que aporta a la economía y el empleo, pero también por lo que supone de cohesión territorial, de fijación de población y de preservación de los valores naturales y paisajísticos de nuestra provincia”.

Jesús Julio Carnero ha señalado que, sin embargo, el sector sufre algunos problemas importantes, como la repetición de cultivos, la baja densidad de población y el envejecimiento de la población, “por lo que desde la Diputación de Valladolid creemos que es imprescindible contribuir a seguir haciendo atractiva la actividad agrícola apostando por nuevos cultivos e incidiendo para ello en factores importantes como la rentabilidad, la creatividad, la tecnología y la innovación”.

En este sentido, y tras recordar que la Diputación de Valladolid siempre se ha preocupado por abrir vías de futuro a la agricultura de nuestra provincia, a través de las experiencias realizadas en la Finca Coto Bajo de Matallana con nuevos cultivos y, sobre todo, en el ámbito de la Agricultura Ecológica, Jesús Julio Carnero ha señalado que “ahora damos un paso más de la mano de una institución como INEA, que nos permite realizar una estudio meticuloso y tener una visión industrial de los nuevos cultivos, lo que nos ayudará no sólo a medir su rentabilidad actual, sino también a poder garantizar su continuidad”.

CULTIVOS ALTERNATIVOS

Hasta el momento ya se han detectado en nuestra provincia una decena de cultivos que son una realidad y que pueden suponer una importante mejora de la rentabilidad de las explotaciones. Seis se enmarcan en la categoría de cultivos extensivos (camelina, cártamo, espelta, sorgo, mijo y lavandín), dos se consideran cultivos leñosos (almendro y nogal) y otros dos cultivos hortícolas (calabaza cabello de ángel y espárragos).

Estos productos se han determinado siguiendo el programa del convenio de colaboración entre la Diputación de Valladolid y el INEA y que se desarrolla a través de 4 fases: documentación, divulgación, formación y seguimiento.

La fase de documentación conlleva la realización de una ficha completa de cada uno de los posibles cultivos alternativos en la que se recogen datos de producciones, precios de mercado y posibilidades de comercialización. Asimismo, se identifica a las personas y empresas que los cultivan, valorando su experiencia y grado de satisfacción, y se obtienen los datos sobre el manejo del cultivo como procesos de acopio, cosecha o rentabilidad.

La fase de divulgación busca dar a conocer todos los datos obtenido a través de diferentes medios, desde la información en los medios de comunicación, las revistas profesionales, los talleres y paneles informativos, las comunicaciones en congresos o jornadas como la que hoy se ha celebrado en INEA, y las redes sociales.

La tercera fase es la de formación, en la que se dará a conocer todo el conocimiento detallado de los cultivos alternativos analizados mediante charlas y conferencias, así como encuentros en parcelas de cultivo comprobar las experiencias ‘in situ’.

Por último, la fase de seguimiento prevé la realización de ensayos con los nuevos cultivos en la Finca Coto Bajo Matallana, analizando la rentabilidad precios e incidencias de los cultivos, así como incorporando a las fichas todas aquellas novedades significativas.

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