El Grupo Virto, especializado en hortalizas, conoce muy bien lo que supone hacer frente a una crisis como la generada por el confinamiento. CAMPO se ha dirigido a la compañía para poder dar testimonio de cómo funciona una empresa como esta cuando debe hacer frente a un crecimiento espectacular de la demanda.
-¿Qué ha supuesto para el Grupo Virto el confinamiento de los españoles y el obligado cambio de hábitos en relación con las compras, la alimentación…?
-Ha supuesto una responsabilidad, ya que somos fabricantes de productos de primera necesidad por lo que desde el inicio de esta crisis, tanto desde Ultracongelados del Duero como desde todas las empresas que conforman el Grupo Virto, hemos estado al pie del cañón, trabajando fines de semana y festivos, para garantizar el suministro y que los consumidores pudiesen disponer de nuestros productos en las tiendas.
Para nuestra empresa esta es una situación sin precedentes. La actividad de muchos clientes del sector HORECA se ha paralizado por completo ante el cierre de bares, restaurantes, hoteles… La venta, en términos generales, se ha trasladado al retail, tanto en España como a nivel internacional. El consumo hasta la fecha se ha desplazado al hogar y se espera que este cambio se mantenga mientras dure el COVID-19.
-¿En qué modo se ha visto alterado su ritmo de trabajo en relación con un cliente como Mercadona?
Al inicio de esta crisis se disparó la demanda de productos de primera necesidad y tuvimos que trabajar duro para garantizar el suministro a todas las tiendas de Mercadona, lo cual logramos. Una vez pasados los primeros momentos de la crisis, hemos comprobado cómo las verduras congeladas han ganado adeptos, lo que se traduce en un incremento del volumen de trabajo.
-¿En qué regiones españoles cultiva su espinaca? ¿Cuáles son sus ciclos de cultivo?
-La espinaca es uno de los principales productos para Grupo Virto. Tanto es así que contamos con un centro especializado en la producción de este vegetal, además de grelos y acelga. Se trata de Ulbasa. Ubicado en Badajoz, es considerado el centro tecnológicamente más avanzado en la producción de este tipo de vegetales de hoja.
Tenemos una producción continua de espinaca que se extiende durante todo el año, excepto en agosto, dadas las altas temperaturas. Cultivamos en diferentes zonas de España en función de los diversos climas. Actualmente, tenemos cultivos en Andalucía, Extremadura y Castilla y León. En la zona de Andalucía, el periodo de siembra se establece entre octubre y principios de febrero, y el de cosecha, entre diciembre y abril. El ciclo de cultivo en esta zona comprende de 60 a90 días, dependiendo de la variedad. La siembre en la zona de Extremadura tiene lugar desde octubre hasta marzo y se cosecha desde noviembre hasta mayo. En este caso el ciclo es algo más largo, entre 70 y 100 días en campo. La zona de Castilla y León se diferencia del resto porque contamos con dos periodos de campaña: en el primero, la siembra tiene lugar entre febrero y principios de mayo y la cosecha, entre mayo y principios de julio. En el segundo periodo, se siembra entre julio y principios de septiembre y se cosecha entre septiembre y noviembre. En esta zona los ciclos de cultivo son más cortos: entre 55 y 75-80 días, como mucho.
De esta forma conseguimos producir durante todo el año, trabajando en diferentes áreas de España pero siempre próximas al centro de especialidad. De esta manera, conseguimos ultracongelar el producto en horas desde su recolección.
-¿Cuántas referencias de espinaca pone Grupo Virto en los lineales de Mercadona?
-Actualmente contamos con cuatro referencias de espinaca en los lineales de Mercadona: tres de ellas son de producto básico pero en diferentes formatos: espinaca hoja en bloques con 2 porciones de 225 g, espinaca en porciones pequeñas irregulares y espinaca picada en pellets. Estas dos últimas en formato de 1 kg.
Además, contamos con una referencia de espinacas a la crema. Un plato preparado terminado que el consumidor puede disfrutar en solo 8 minutos y que le ofrece la versatilidad de cocinarlo tanto a la sartén como en el microondas.
-¿Cuáles son los principales retos de la espinaca a la hora de conseguir una cantidad y calidad como la exigida por Mercadona?
-Nuestro objetivo no es otro que el fabricar espinacas con la máxima Calidad y Seguridad Alimentaria. Esto nos exige estar siempre a la vanguardia en procesos productivos e invertir todo lo necesario para ofrecer a nuestros consumidores la mejor calidad, al mejor precio posible.
Contamos con el centro de producción de espinaca tecnológicamente más avanzado del sector, con un parque de maquinaria de última generación y selectoras ópticas programadas para eliminar los defectos que pueden traer las espinacas por el mero hecho de ser cosechadas en el campo: hierbas, insectos, variaciones de color… Muchos de estos defectos pasan desapercibidos para el ojo humano. Sin embargo, las selectoras ópticas están diseñadas para ello. Contamos con 14 máquinas de este tipo y con personal especialista en la programación de este tipo de tecnología.
Todos nuestros centros productivos son especialistas en el tipo de productos que se fabrican, y utilizan la más avanzada tecnología.
-En cuanto al guisante, ¿cuántas referencias suyas existen en las cámaras de Mercadona?
-En la actualidad contamos con dos referencias en los lineales de Mercadona: guisante fino en formato de 1 kg y un guisante más tierno y dulce en formato 300 g. Ambos productos son de calidad premium.
-¿En qué zonas de producción se obtiene ese guisante? ¿Con qué ciclos?
-Grupo Virto es líder en la producción de guisante. Su producción se reparte en varios centros de especialidad situados próximos a las zonas de cultivo. Uno de ellos es Ultracongelados del Duero. El guisante es un producto de cercanía. Al igual que en el caso de la espinaca, el transporte del campo a la fábrica es muy rápido y el producto es ultracongelado en cuestión de unas pocas horas desde su recolección.
Las principales zonas en las que cultivamos guisante son: Castilla y León, Castilla La Mancha, Extremadura, Navarra, La Rioja y Aragón.
Es ciclo de este producto es muy diferente al de la espinaca: comenzamos a sembrarlo en diciembre y acabamos en marzo, mientras que la recogida se produce entre mayo y principios de julio.
-¿Cuáles son sus retos en relación con este cultivo?
-Nuestro principal reto siempre ha consistido en seguir trabajando con los agricultores mano a mano, buscando mayor rentabilidad en campo y eficiencia en el proceso productivo en las plantas, cada vez en más hectáreas de cultivo y siempre bajo la premisa de la especialización desde el campo hasta la mesa.
–¿Cómo es Mercadona como cliente y cómo definiría su relación con esa empresa?
-Grupo Virto es proveedor de Mercadona desde hace 27 años. Mercadona es un cliente que busca un producto de alta calidad, exige un gran servicio y a un precio justo, siempre con total Seguridad Alimentaria.