Castilla y León es una zona privilegiada para el vacuno de leche y, de hecho, supone el 12,44% de la producción nacional de leche de vaca. Una actividad nada desdeñable, por mucho que quede muy lejos del 40% que representa Galicia, y que cuenta con la ventaja competitiva de situar muy cerca la producción respecto al principal consumidor, que es la Comunidad de Madrid y sus 6,7 millones de habitantes.
Se trata de un sector estructurado, como demuestra el hecho de que el 85% de la leche producida en Castilla y León se entrega en la comunidad. Y es un sector joven, con una media de edad de 51 años en el conjunto de España, y de 52 años en Castilla y León: una media diez años inferior a la de la agricultura.
La evolución del sector marca una constante, con un número decreciente de explotaciones, pero con unas granjas más dimensionadas con los años. Con el problema, eso sí, de unos precios altamente volátiles, lo que ha llevado a que los acuerdos de precios tengan una vigencia de apenas tres meses.
España pierde granjas
Pero la situación no es ideal. Tras la publicación de los datos del sector vacuno, ovino y caprino de leche de diciembre de 2022 por parte del Ministerio de Agricultura, se ha denunciado la debacle del eslabón productor del sector lácteo, con un cierre de granjas superior a las cifras habituales.
Según las cuentas de Unión de Uniones, a diciembre de 2022 quedaban en España 10.665 granjas de vacuno, 2.667 granjas de ovino y 3.851 granjas de caprino de leche. Con ello, descendía su número en vacuno en 782 granjas (-7% con 2,1 granjas menos al día); ovino: 258 (-9%, con 0,7 granjas menos al día) y caprino: 602 (-14%, con 1,6 granjas menos al día).
Si bien los datos muestran una mala situación en todo el territorio nacional, algunas comunidades han sufrido en mayor medida esta reducción de ganaderos. En ovino de leche los territorios más afectados son la Comunidad Valenciana, Aragón, la comunidad de Madrid, Cantabria y el País Vasco, con caídas de entre un 50 y 25% de las granjas.
Castilla y León ha perdido al 9% de sus explotaciones, mientras que en Castilla-La Mancha el número de ganaderos ha crecido el pasado año.
Caen las explotaciones de vacuno
En vacuno, repite la Comunidad Valenciana, que junto con La Rioja y Extremadura ha perdido entre un 17 y un 22% de sus granjas. Las regiones tradicionalmente productoras, como las de la cornisa cantábrica y Castilla y León, han soportado un cierre de más del 7% de sus granjas.
Por último, el sector caprino, que es el que más ha sufrido las pérdidas de ganaderos, ha tenido una mayor proporción de cierre de granjas en Baleares, Madrid, Aragón, Comunidad Valenciana y Extremadura.
Menor producción
En este caso, las regiones de importancia en la producción (Andalucía, Castilla-La Mancha, Murcia, Canarias, Extremadura y Castilla y León) han registrado caídas importantes como el 17% en Extremadura, el 13% en Castilla-La Mancha, el 11% en Canarias y Andalucía o el 8% en Castilla y León.
Fruto de esta crisis en el eslabón productor, se ha dado una fuerte caída en la producción que, sin duda, se ha trasladado hasta el consumidor. En total se han producido 60.000 toneladas menos de leche, con una caída en la producción respecto al año pasado del 1,8% de leche de oveja, 2,2% de leche de vaca y 2,2% de leche de cabra, según la Unión.
