Dos centenares de agricultores, según los organizadores, han acudido este viernes a Arévalo para secundar la convocatoria de las organizaciones agrarias mayoritarias en Castilla y León, Asaja y la Alianza UPA-COAG, para movilizarse en defensa de la producción cerealista de Castilla y León y de unos precios que permitan la rentabilidad en estos cultivos.
La concentración ha tenido lugar ante la Harinera Vilafranquina y posteriormente se ha realizado una marcha hasta las instalaciones del mayorista de cereales Octaviano Palomo, bajo el lema ‘Costes, importaciones y especulación arruinan nuestra producción’.
El presidente de Asaja-Castilla y León, Donaciano Dujo, había manifestado anteriormente ante los medios de comunicación que esta movilización da continuidad a la emprendida hace un mes ante la Delegación del Gobierno en Castilla y León, y tendrá continuidad en diciembre.
“No pararemos, ya sea a nivel provincial, regional o nacional, porque llevamos dos cosechas de cereal ruinosas, una por la sequía y otra por unos precios que están cien euros por tonelada por debajo del que deberían tener para poder cubrir los costes y que nuestro trabajo se vea compensado”, afirmó Donaciano Dujo.
Tanto el presidente de Asaja como los presidentes de Alianza UPA-COAG, Aurelio González y Lorenzo Rivera, anunciaron en la rueda de prensa celebrada el lunes 25 de noviembre que esta concentración de productores de cereal tiene como objetivo “denunciar la crisis económica que sufre el sector, debido, por una parte, al elevado coste de los factores de producción y por otra parte, a un mercado devaluado por el efecto de importaciones masivas y la especulación de operadores que utilizan éstas para bajar los precios a las producciones locales”.
500 millones de euros
Durante la intervención ante los medios y manifestantes, Dujo cuantificó en quinientos millones de euros el importe total de menoscabo en las cuentas de los agricultores cerealistas de Castilla y León en esta campaña pasada, debido a esos bajos precios, que han bajado el 40% con respecto a los que tenían hace dos años -unos 130 euros menos por tonelada-.
“Con recuperar la mitad de esa bajada -unos 65 euros/tonelada- ya se lograrían niveles de rentabilidad. Se ha pasado de unos costes de producción por hectárea de cereal de unos quinientos euros a rondar los ochocientos, lo que nos obliga a unos rendimientos superiores a la media para que estos cultivos resulten rentables y no sigamos cada vez sembrando menos cereal y dejando incluso de abonarlo. Trabajando así nos arruinamos“, añade el presidente de Asaja-Castilla y León.
“Castilla y León va a dejar de ser el granero de España. Y por este camino toda la alimentación de nuestra ganadería se terminará trayendo de fuera, con peor calidad y, a la larga, cuando no haya remedio, más cara”, vaticina el presidente de ASAJA-Castilla y León, acompañado por el secretario general de UPA en la comunidad, Aurelio González y el coordinador general de COAG, Lorenzo Rivera.
Concentraciones en Castilla-La Mancha
Este es sólo uno de los muchos actos de protesta que tendrán lugar en diferentes puntos del territorio español, a partir del 10 de diciembre, en defensa de la agricultura cerealista. Por su parte, Asaja Castilla-La Mancha se movilizará el 17 de diciembre en Toledo, para demandar medidas inmediatas que garanticen la viabilidad de las explotaciones agrarias. La concentración se celebrará en la sede provisional de la Delegación del Gobierno en Castilla-La Mancha.
A partir de las 11:00 de la mañana en la plaza de San Vicente de Toledo, los agricultores defenderán sus producciones y pedirán la triple sostenibilidad económica, social y medioambiental. Así lo ha dado a conocer el presidente de Asaja CLM, José María Fresneda, en la rueda de prensa ofrecida para informar de los detalles y los motivos de la movilización.