Esta organización exige una rectificación inmediata de la información emitida el pasado lunes en Televisión Española donde se calificó al vino “como la droga legal más consumida en España”.
Si hace unas semanas el culpable de todos los males en la alimentación era el azúcar por una campaña del Ministerio de Consumo, en esta ocasión, le ha tocado a otro de nuestros mejores alimentos: el vino. Asaja Valladolid pide, que de una vez, cesen las campañas interesadas para criminalizar injustificadamente determinados alimentos.
Para esta organización, es “inadmisible” que el pasado 14 de diciembre, en el telediario de La 1 de las 15 horas, se señalase en una noticia que “el vino era la droga legal más consumida en España”. Una información que es falsa, errónea y carente de base científica, que induce al consumidor al alarmismo y la confusión.
“El vino, además de ser el mayor embajador de la calidad de los productos de nuestros agricultores, es uno de nuestros alimentos con mayores propiedades beneficiosas si es tomado con moderación. Entre sus numerosos beneficios acreditados destaca que ayuda a prevenir la demencia, retrasa el envejecimiento, reduce el riesgo cardíaco, protege contra las quemaduras solares, fortalece los huesos y previene varios tipos de cáncer como el de colón o el de pecho”, argumentan.
Por ello, Asaja Valladolid exige a RTVE una rectificación inmediata de la desafortunada información que daña gravemente el trabajo de un sector, que genera de forma directa 6.500 millones de euros anuales en España.
Asaja Valladolid considera que más que criminalizar un producto como el vino, habría que ensalzar el valor que tiene, ya que España es una potencia mundial en un sector muy competitivo en el que viticultores y bodegueros han hecho un esfuerzo e inversiones dignos de elogio.
España es el país con más superficie de viñedo del mundo con 938.000 hectáreas y el tercer mayor productor de vino del planeta, exportando a más de 189 países. Además, genera cerca de 427.700 puestos de trabajo siendo el 2,4% del empleo en España. Solo en el año 2019, se exportaron 3.000 millones de euros y la aportación directa a las arcas públicas fue de 3.800 millones de euros.