La Consejería de Agricultura y Ganadería destinará 40 millones de euros en ayudas para los 2.682 nuevos contratos plurianuales de las medidas de agroambiente y clima y de agricultura ecológica que se han sumado en la convocatoria del primer semestre de 2017.
Crece un 26,4%, hasta los 12.823, el número de agricultores y ganaderos que se ha incorporado a este tipo de prácticas agrarias compatibles con la conservación del medio ambiente que se enmarcan en el Programa de Desarrollo Rural (PDR) de Castilla y León 2014-2020 y que destina el 14% del presupuesto a este tipo de ayudas con 248 millones de euros, de los cuales 218,5 millones de euros irán dirigidos a medidas de agroambiente y clima y 29,5 millones de euros a agricultura ecológica.
Todas ellas están cofinanciadas por fondos agrícolas de desarrollo rural de la Unión Europea, la Junta de Castilla y León y el Ministerio de Agricultura y Pesca, Alimentación y Medio Ambiente. Para ello, los agricultores firman un contrato en el que se comprometen a determinadas acciones con beneficios sobre el medio ambiente y/o clima, asumiendo compromisos más exigentes respecto de las buenas prácticas de cultivo normales, por lo que perciben un importe que varía en función de cada línea de ayuda.
En los próximos días, los agricultores y ganaderos que solicitaron estas incorporaciones recibirán una comunicación con la resolución aprobatoria y, a partir de esa fecha, podrán formalizar el contrato plurianual de cinco años.
Crece un 26,4% el número de agricultores y ganaderos que se ha incorporado a las prácticas agrarias compatibles con la conservación del medio ambiente
Dentro del conjunto de acciones de agroambiente y clima destacan las orientadas a prácticas ganaderas extensivas, así como otras que pretenden conservar las razas ganaderas autóctonas que se encuentran en peligro de extinción y también aquellas que favorecen la práctica polinizadora de la apicultura.
En cuanto a las prácticas agrícolas, se encuentran aquellas que se aplican en superficies agrarias de cultivos agroindustriales sostenibles como es el caso de la remolacha azucarera, la producción integrada, el mantenimiento de cultivos permanentes en paisajes singulares y la agricultura sostenible en los humedales de La Nava, en la provincia de Palencia, y Villafáfila, en Zamora.
Estas ayudas incluyen también a los agricultores ecológicos que ven apoyada su acción al poder incorporarse a estos contratos y percibir subvenciones que reconocen los beneficios ambientales de la práctica ecológica, la subsiguiente aportación al sector de materias primas e, incluso, productos elaborados que llegarán finalmente al consumidor, objetivos todos ellos recogidos en el Plan Estratégico de Producción Ecológica de Castilla y León 2016-2020.
Fotografía: Cultivos agricultura ecológica. AUTOR: AEFA.