Los embalses han incrementado sus reservas en 63 hectómetros cúbicos desde principios de mes
La Comisión Permanente de la Sequía de la cuenca del Duero, reunida el pasado viernes en Valladolid, ha evaluado el aumento del volumen de agua registrado en los embalses de esta demarcación, cifrado en 63 hectómetros cúbicos gracias a las últimas lluvias y nieve registradas durante los últimos diez días.
Los integrantes de la comisión han acordado proponer al organismo de cuenca que en en 2018 “se vigile con especial celo la normativa de control sobre el regadío mediante el uso de contadores, elementos indispensables para medir los consumos y evitar situaciones de abuso sobre el dominio público hidráulico y los recursos disponibles”.
Aunque todavía se encuentran muy alejados de los valores medios propios de la primera quincena de diciembre, este incremento de agua almacenada ha mejorado ligeramente la situación de los embalses del Duero, principalmente los de la provincia de León, destacando los de los sistemas Órbigo y Esla. También se hizo mención al incremento del caudal del río Tuerto, que ha permitido acumular medio hectómetro cúbico más en la presa de Villameca, de la que se abastece Astorga, mejorando las reservas para atender las demandas de consumo humano en los próximos meses.
Dentro del Sistema Órbigo, Barrios de Luna ha duplicado su volumen almacenado y ha pasado de 13,8 a 27 hectómetros cúbicos, mientras que en el Esla se han producido ganancias notables en sus dos embalses: Riaño y Porma, que han incrementado sus reservas en 24,5 y 9,4 hectómetros cúbicos, respectivamente. Por tanto, los embalses de León han incrementado sus volúmenes en casi 48 hectómetros cúbicos en los últimos diez días.
Por su parte, los sistemas Carrión y Pisuerga, en Palencia, experimentan también un aumento de reservas pero de manera más tibia. Así, en el Carrión, Compuerto y Camporredondo suman 6,3 hectómetros cúbicos más hasta alcanzar 23,1, en tanto que los embalses de Requejada, Cervera y Aguilar, en el sistema Pisuerga, registran una subida de 5,8 hectómetros cúbicos –contienen casi una treintena entre los tres-, de manera que la situación de ambas zonas sigue siendo delicada.
Los embalses de León han incrementado sus volúmenes en casi 48 hectómetros cúbicos en los últimos diez días
También se han observado mejoras muy discretas en Cuerda del Pozo (Soria), que gana casi dos hectómetros cúbicos al crecer el caudal de entrada del Duero hasta los 4,1 metros cúbicos por segundo. En el extremo opuesto se encuentran Las Cogotas (Ávila), Úzquiza (Burgos) e Irueña (Salamanca), que experimentan pequeños descensos por haber llovido menos en esas zonas, aun cuando se aprecia una clara mejora de los caudales de entrada en las últimas semanas.
Además, los asistentes a la comisión recordaron que continúa la situación de déficit hídrico en la cuenca del Duero, si bien “una pluviometría normal en los próximos cuatro meses dejaría los embalses en un estado aceptable de cara a la atención de las demandas a lo largo de 2018”, como señalan desde la Confederación Hidrográfia del Duero.