El sector del vino se beneficia en Castilla y León de una posición de cierta ventaja gracias a unas arraigadas prácticas culturales y a la modernización de la actividad, pero no deja de estar sometido a los vaivenes de un mercado cada día más global. De sus amenazas y fortalezas se debatirá en la jornada técnica que prepara para el mes de marzo la publicación CAMPO junto al Ayuntamiento de Rueda y el consejo regulador de la denominación de origen.
La economía del vino
Durante las sesiones se debatirá sobre las plagas y enfermedades del viñedo, así como sobre la mecanización de las labores y sobre aspectos como la gestión económica de la viña, la PAC o las ayudas a la viticultura ecológica o integrada. Por último, una mesa redonda sobre ‘El negocio de la viña’ contará con la participación de viticultores, bodegueros y técnicos de diferentes puntos de España.
Durante la jornada se presentará el libro ‘La economía del vino en España y en el mundo’, editado por el Servicio de Estudios de Cajamar y que responde a la idea de que la comprensión integral del fenómeno de la vid y del vino, en su triple dimensión de producción, distribución y consumo, “requiere una consideración conjunta de sus implicaciones económicas, sociales y territoriales”. Así se señala en la introducción del libro, coordinado por Raúl Compés, de la Universidad Politécnica de Valencia, y Juan Sebastián Castillo, de la Universidad de Castilla-La Mancha. La publicación analiza la posición competitiva de la oferta española en relación con los principales productores internacionales y se plantea cómo mejorar su rentabilidad y liderazgo mundial. En la redacción de la obra han participado 35 especialistas e investigadores de diferentes instituciones españolas e internacionales.
Un sector estratégico
El sector vitivinícola de Castilla y León está formado por 620 bodegas, que producen dos millones de hectolitros de vino y generan 667 millones de euros anuales. 19.300 personas están dedicadas a una actividad con 13 figuras de calidad reconocidas y que en 2013 exportó 30 millones de litros, lo que generó una facturación cercana a los 135 millones de euros.