El cambio euro-dólar ha llevado a las subidas de precios experimentadas por el cereal en las últimas semanas. Los mercados siguen pendientes de Argentina, Rusia… y EEUU
Las elecciones presidenciales en EEUU han despertado la volatilidad de los mercados después de varios meses de tranquilidad. Las operaciones con materias primas vivieron un ligero temblor, con relevantes alteraciones financieras, a raíz del 8 de noviembre, el día en que se cerraron los colegios electorales y se dieron a conocer los resultados.
Durante los primeros días todas las miradas se situaron en el precio del billete verde, con un euro situado por encima de los 1,14 dólares, en un contexto en el que cabía prever que el euro tirara del precio de las materias primas hacia abajo.
Con el paso de los días se disipó la expectativa de una bajada de tipos en EEUU y la moneda europea se ha terminado situando por debajo de los 1,06 dólares, con lo que las importaciones han registrado un rally de precios al alza.
Al incrementarse los precios también se ha dado una mayor retención de producto, con un descenso de las ventas y una mayor demanda en el mercado español y europeo; ahí radica la razón de las alzas de precios registradas últimamente.
El caso más extremo ha sido el de la soja, con una subida de 50 dólares por tonelada (en torno al 15% de su precio) en menos de un mes.
La mercancía sigue estando en los almacenes y se le seguirá dando salida, con el previsible incremento de la actividad con el nuevo año y el cambio en el ejercicio fiscal, aunque en enero puede regresar la pesadez al mercado; en ese contexto cabe prever alguna bajada de precios.
que se han obtenido en países como Argentina, Estados Unidos o la Federación Rusa, una abundancia de oferta que se acabará reflejando en la demanda y, por lo tanto, en los precios de las materias primas.
Alfonso Palomo, director comercial de O. Palomo