La Confederación Hidrográfica del Duero, organismo autónomo adscrito al Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, participa en el Grupo Operativo Supraautonómico Cereal Agua, que proyecta acciones de transferencia e innovación enfocadas a un cultivo de cereal más rentable, sostenible y adaptado al cambio climático.
Bajo un enfoque de gestión de cuenca hidrográfica, este Grupo Operativo aboga por una agricultura de regadío digital, inteligente y sostenible, que se convierta en motor del empleo rural y de calidad para que jóvenes y mujeres se queden en el territorio.
Con este objetivo, se van a desarrollar en la próxima campaña distintos ensayos tecnológicos aplicados al cereal en la zona regable de la Armuña (Salamanca) y en la Moraña (Ávila), donde se aplicarán medidas de protección de suelo, ahorro de agua en riego, mejora del paisaje y otros instrumentos de monitorización de variables agronómicas, mediante la utilización de sensores de humedad edáfica, información de satélite y sistemas de mejora de la precisión en las labores de los cultivos, trigo y maíz mayoritariamente, aunque este tipo de ensayos pueden servir para todo tipo de cultivos herbáceos. Unas acciones que se van a llevar a cabo simultáneamente en otras fincas piloto seleccionadas en las Vegas del Alagón (Cáceres) y en la Campiña cordobesa.
El grupo desarrolla distintas ocurre con el proyecto integrado llevar a cabo medidas de Planificación y Gestión en la zona sur del Duero, entre los ríos Zapardiel y Guareña, en una zona con una muy especial problemática de las aguas subterráneas, participativas y exportables Un proyecto integrado vincula instrumento transformador y una oportunidad de empleo elementos de gestión de gran impacto, como son las Comunidades de Usuarios de Aguas Subterráneas (CUAS), como indicadores en la organización del territorio.
Tras las Jornadas de Divulgación llevadas a cabo en la localidad abulense de Arévalo, en la que han participado agricultores de la zona, el Grupo Operativo sigue trabajando en la consecución de los distintos socioeconómicos vinculados al agua, el suelo, el paisaje, el empleo y los mercados, sin descartar la búsqueda de alternativas al cultivo del cereal.
Un proceso de cambio que pretende liderar para ahondar en un buen manejo del cultivo de cereal que se traduzca en una mayor producción, de más calidad y rentabilidad, reduciendo costes y contribuyendo al mejor uso del agua e integración de los ecosistemas.
El Grupo Operativo supraautonómico Cereal Agua comenzó sus trabajos en 2018 y está formado por entidades de Andalucía, Extremadura y Castilla y León. Liderado por Ambienta, pyme dedicada a la ingeniería y servicios en el ámbito agrícola y forestal, también forman parte las Universidades de Salamanca y Córdoba.