Cinco noches de temperaturas muy bajas han hecho mella en los cultivos más vulnerables, aquellos en fase de floración o en sus primeros estadios de desarrollo.
Los técnicos de Agroseguro han recibido partes por unas 300 hectáreas de remolacha y lo más probable es que se reciban más, ya que las heladas han sorprendido a la planta en fase de cotiledones. Va a ser uno de los cultivos más afectados por este extraño regreso al invierno, que se ha producido cuando ya habíamos entrado en el mes de abril.
El viñedo se salva de la quema
Para el delegado de Agroseguro, José Ignacio García Barasoáin, los técnicos de la entidad permanecen “muy atentos” al viñedo, “aunque esperamos que haya ido bien porque en su mayoría está en fase de yema A, que cuenta con gran capacidad de resistencia”.
Sí se pueden haber producido daños en las plantas más jóvenes, que suelen ir algo más adelantadas. En algunos puntos de la Ribera del Duero, como Vadocondes, en Burgos, se han alcanzado los -8 °C.
De momento no se han recibido partes por daños en la viña y los responsables de Agroseguro han confirmado, en conversaciones con bodegas y consejos reguladores, que no hay daños importantes. En parte gracias estar en fase de yema A, como se ha señalado, pero también porque la helada más fuerte, en la madrugada del lunes, se produjo después de varios días de temperaturas bajas.
Almendros y frutales, en el peor momento
Lo más probable es que los almendros estén muy afectados, igual que árboles frutales como la Manzana Reineta o la Pera Conferencia del Bierzo.
El frío también ha sido inclemente con la comarca berciana y se han registrado temperaturas de -2 y -3 °C. Incluso en Carracedelo se han alcanzado los -5 °C.
“Los efectos de la helada se notarán más cuando pasen unos días y las temperaturas sean más suaves”, anticipa Barasoáin.
La colza aguanta, aunque ha perdido flor
La colza está afectada, sobre todo la de regadío, que en general está más adelantada y ya se encuentra en flor. Las oficinas de Agroseguro han recibido hasta ahora partes por unas cien hectáreas, principalmente de provincias como Salamanca o Valladolid.
En el valle del Esgueva la colza ha acusado las bajas temperaturas. Diego Hernández, de Villarmentero de Esgueva, señala que la planta no estaba demasiado adelantada. Incluso la de regadío. “Ahí hemos tenido suerte”.
La planta ha quedado doblada, pero la única parte que se pierde es la flor, de modo que la colza se seguirá desarrollando y dando nuevas flores.
A la alfalfa le costará recuperarse
En el valle la alfalfa se ha visto afectada. Ya estaba en un 70% de su desarrollo con vistas al primer corte, aprovechando la humedad del terreno y las temperaturas suaves.
“El tallo se ha doblado y a la planta le costará recuperarse más que a otros cultivos”, recalca Diego Hernández.