Edu Mongil
Los inconvenientes para los profesionales del campo parecen no tener fin. Al difícil día a día de muchos de ellos se les ha sumado una nueva piedra: las multas derivadas de las protestas de los últimos meses.
En estas semanas, las notificaciones de sanciones por parte de las diferentes administraciones se han intensificado, y los agricultores y ganaderos creen que es una estrategia para que dejen de movilizarse de una vez.
Solo en Castilla y León ya han llegado más de 200 denuncias, un número que crece cada día y que no parece que vaya a cesar. Las presuntas infracciones se centran especialmente en cortes de carreteras y autovías o en delitos de desobediencia a los agentes de policía, pero también hay sobre la mesa, incluso, acusaciones por terrorismo para algunos agricultores.
Desde la asociación ‘Por la Unión del Campo’ aseguran sentir “miedo” ante esta oleada de denuncias, en lo que consideran un cambio de postura de las autoridades. Los profesionales aseguran que, en un principio, les habían garantizado cierta permisividad, algo que ahora ha saltado por los aires.
Este fenómeno no es exclusivo de Castilla y León. En Castilla-La Mancha también han comenzado a recibir muchas más sanciones en las últimas fechas. Los agricultores denuncian que se ha multado a gente que tenía sus tractores aparcados en vías de servicio o, incluso, en propiedades privadas. Se habla de que las multas alcanzan hasta los 600 euros.
En Andalucía, el goteo llegó desde el principio, aunque las multas no eran excesivas. Muchas de ellas fueron también por cortes de carreteras o por maniobrar con los tractores en las autovías. No obstante, hubo cargas policiales y detenciones en Sevilla, Almería o Antequera, cuyo recorrido judicial aún está por determinar.
Uno de los casos más sonados ha tenido lugar en La Rioja. El ganadero Javier Moro fue detenido por, presuntamente, intentar atropellar a dos Policías Locales en Logroño el 6 de febrero. Tras el juicio, que ya está visto para sentencia, Moro se enfrenta a una condena de 3 años y un día de prisión por un delito de atentado a la autoridad y 45 días de multa por cada uno de los dos delitos leves de lesiones.
Crowdfundings de ayuda
Tanto en el caso de Moro como el de los detenidos en Andalucía se han habilitado crowdfundings para ayudar en la medida de lo posible a sobrellevar las consecuencias de las sanciones, pero los agricultores ya están cansados.
Aun así, Guadalupe Tejero, de AGRIGAL, una de las organizaciones que sigue saliendo a la calle, afirma que “no nos van a quitar nuestro modo de protestar por muchas multas que nos pongan. Nos están intentando asfixiar para que no produzcamos, igual es para que venga todo de fuera”.
Además, asegura que a muchos agricultores y ganaderos les están realizando inspecciones desde el comienzo de las concentraciones. “A nadie le gusta eso, nos quieren asfixiar, pero no nos van a coaccionar. Somos muy profesionales y hacemos las cosas bien. No tenemos nada que esconder”.
Tejero además afirma que conoce casos de “gente denunciada sin estar en las manifestaciones”, o de personas a las que les han llegado tres denuncias. Sobre el primer hecho, la teoría que tienen es que “han podido tomar los datos de las matrículas o algo, porque ni siquiera apuntaron”, y remacha con una sensación general: “Se creen que somos delincuentes”.
