Los precios de los insumos se han disparado, particularmente de los fertilizantes y el hundimiento de los precios del petróleo también ha incidido a la baja en el precio de las materias primas, aunque sin afectar el precio de los fertilizantes. “La situación es insostenible”, recalcan.
El paquete de 500 millones de euros liberado por la UE a finales de septiembre “no fue para nada suficiente para afrontar la mala situación de los mercados y lo que es peor, sólo se ha pagado el 25% de la ayuda”. A no ser que la UE tome medidas ya, apuntan, “se van a llegar a niveles sin precedentes que van a dejar en muy grave situación la economía rural y que van a impedir a la UE alimentar a la creciente población del futuro”.
También explican que “deben combatirse las prácticas comerciales desleales a lo largo de la cadena alimentaria para que los agricultores consigan mejores precios por sus productos y no sean exprimidos por la distribución”. El precio de los insumos puede rebajarse suprimiendo las tasas de importación, particularmente para los fertilizantes “y necesitamos más bonificaciones para préstamos/deudas para inversiones por parte del Banco Europeo de Inversiones, ayudas de Estado, así como el ajuste del techo de la ayuda de minimis”.
Por otra parte, los Estados miembros también tienen que “utilizar plenamente las herramientas que pone a su disposición la política de Desarrollo rural y los regímenes nacionales para ayudar a los agricultores a gestionar mejor el riesgo”.