La Universidad Católica de Ávila (UCAV) y la Asociación Vinos de Cebreros han firmado un convenio marco de colaboración para la promoción de actividades científicas de investigación y desarrollo tecnológico, así como la facilidad de asesoramiento mutuo, la colaboración entre expertos, la formación de personal y la adquisición de conocimientos aplicables a sus respectivas áreas de interés.
El patrimonio vitivinícola abulense y la perseverancia de sus productores ha dado origen a la denominación de Origen de Cebreros, fruto del esfuerzo para que se reconozcan las características singulares y que cuenta ya con más de 500 hectáreas inscritas.
Esta colaboración abre un marco de estudios multidisciplinares, que darán comienzo con el estudio de la salud del suelo del viñedo, y que busca conocer el microbioma característico, las características climáticas y edafológicas, a nivel de variedad y localización, para entender mejor la resiliencia de este sistema frente a los cambios, su vulnerabilidad frente a la erosión y la pérdida de suelo. Todo ello se llevará a cabo con el desarrollo de tesis doctorales e investigación específica al respecto.
Según el presidente de la DOP Cebreros, Rafael Mancebo Fernández, este compromiso tiene como fin seguir profesionalizando la DOP Cebreros. “Somos una joven denominación que necesita de muchos cómplices para asentarse y, sobre todo, para perdurar en el tiempo. Este convenio servirá para asentar un poco más todo lo que venimos haciendo desde nuestro nacimiento en el año 2017”. Además, ha explicado que con estos trabajos los elaboradores tendrán información sobre los tratamientos a seguir según los resultados, lo que repercutirá positivamente en el producto final. “Vivimos tiempos de cambios, por lo que toda información mejorara los resultados en las elaboraciones”.
“Esto es un paso más porque seguimos poniendo cimientos para que nuestra denominación se consolide y siga profesionalizándose”, ha concluido.
Por su parte, Cristina Lucini, Investigador principal Grupos Producción Vegetal y Calidad Agroalimentaria (PROVECAV), ha destacado que este acuerdo pone en valor el patrimonio rural abulense. “Vamos a intentar dar visibilidad a la zona, a los viñedos y a las cepas. Estamos trabajando para caracterizar los factores bióticos y abióticos que permiten que estas cepas centenarias continúen brindando las calidades del vino de la DOP, reconocido a nivel internacional. Vamos a estudiar los suelos vivos con herramientas que ya disponemos para poder caracterizarlos a nivel de las raíces, y determinar el misterio de qué tienen este tipo de suelos para que puedan seguir produciendo con estas cepas centenarias, también teniendo en cuenta la climatología”, ha concluido.
Esta colaboración promete ser beneficiosa tanto para la comunidad académica como para la industria del vino de la D.O.P. Cebreros y se espera que genere resultados tangibles en forma de investigación innovadora y avances tecnológicos en los próximos años.
