LESA lleva 51 años estando ‘a las duras y a las maduras’ con el agricultor. De ahí la importancia de esa seguridad que aporta gracias a su trabajo cercano, que se hace notar especialmente en años como este, con resultados históricamente bajos
Marta Giralda y José Julio Martín. Dpto. técnico LESA
Podemos dar por concluida la campaña 2017, como era de esperar en un principio negativa. También, y como diría algún erudito, “siempre peor de lo esperado”. Las causas, las ya sabidas: la principal ha sido la sequía, pero no tenemos que olvidarnos de las heladas a finales de la primavera y de los golpes de calor prematuros, y duraderos en tiempo, que han debido soportar los cultivos.
Análisis por comarcas. En cuanto a las producciones obtenidas, merece la pena hacer un análisis por comarcas. En Tierra de Campos o el sur del Duero se han recogido entre cero y 700 kilogramos por hectárea, lo que las sitúa como las peores comarcas de Castilla y León. En todo caso, podemos asegurar que se repite esta tónica en todas las provincias de la comunidad.
Secano y regadío. No podíamos pensar que, después del pasado año, espectacular en producciones en toda Castilla y León, se nos fuese a presentar este año como el peor de los conocidos en las últimas tres décadas, tanto en secano como en regadío. Y este último, además, estando a expensas de las últimas medidas y avisos realizados desde la Confederación Hidrográfica del Duero, lo cual ya de por sí es más que preocupante.
Seguridad. Este panorama nos debe hace reflexionar sobre la importancia de las decisiones que el agricultor ha de ir tomando. Asegurando su cosecha por un lado, y confiando en sus proveedores habituales, con la idea de tener esa seguridad en su trabajo y confianza con la que le respalda.
Reducir la incertidumbre. De esta forma, tenemos que tratar de minimizar la incertidumbre generada en la agricultura, en la medida que sea posible, tanto por parte de los agricultores como de las empresas del sector; incertidumbre basada en cultivos, precios, condiciones climáticas, globalizaciones…
La apuesta de LESA. Por esa razón cabe destacar el papel desempeñado por compañías como LESA, que respalda la actividad diaria del agricultor transmitiendo esa confianza conseguida a lo largo de los años con su política de trabajo, trato directo y familiar, aportando una tranquilidad que resulta muy difícil de encontrar hoy en día… Estando ‘a las duras y a las maduras’, algo de lo que no siempre se puede presumir en la actualidad. Nuestra trayectoria nos avala; son más de 51 años trabajando por y para el campo.
Caminar de la mano. En definitiva, ahora que el agricultor ha finalizado su cosecha, y sobre todo ahora que debe empezar a planificar el año siguiente, es una ocasión para transmitir la importancia que tiene la relación agricultor-almacenista en la actualidad. En realidad más de lo que se piensa, y es que ambas partes tienen que ir de la mano. Unos eslabones de la cadena dependemos de los otros, y esta realidad se pone de manifiesto especialmente en años como el actual, que será recordado por esos resultados históricamente bajos.
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