Desde el primer periodo hábil para efectuar los pagos relativos a las solicitudes PAC de 2020, segunda quincena del mes de octubre de 2020, la Consejería de agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural ya ha autorizado pagos de anticipos de ayudas directas por valor de más de 577 millones de euros (70 % del importe).
Aquí entran las ayudas por superficies (517,5 millones de euros), las ayudas a las explotaciones de vacas nodrizas y vacuno de leche (42,6 millones de euros) y los pagos que esta misma semana se autorizan a las explotaciones de ovino por importe de 17,2 millones de euros.
Respecto a las ayudas anteriores, y en relación con el caso concreto del ovino, hay que señalar que se ha dictado la resolución de concesión de las ayudas destinadas en el año 2020 a las explotaciones ovinas y caprinas de Castilla y León.
Todas ellas con dificultades de comercialización de corderos y cabritos, durante los meses de marzo y abril, como consecuencia de las limitaciones impuestas por el Real Decreto 463/2020, de 14 de marzo por el que se declara el estado de alarma para la gestión de la situación de crisis sanitaria ocasionada por la COVID-19, por importe de 4,1 millones de euros.
En relación con las medidas de desarrollo rural, la Consejería de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural ha iniciado los procedimientos de pago de las medidas de agroambiente y clima, agricultura ecológica y a las explotaciones en zonas de montaña del Programa de Desarrollo Rural de Castilla y León 2014-2020.
En concreto, ha autorizado el pago del 85% de la submedidas: apicultura para la mejora de la biodiversidad, cultivos agroindustriales sostenibles, gestión sostenible de superficies forrajeras pastables y apoyo a los sistemas tradicionales de pastoreo trashumante y de mantenimiento de paisajes naturales, así como la medida de agricultura ecológica y las ayudas a las explotaciones ubicadas en zonas de montaña.
Anticipos al ovino, solicitudes 2020
La semana próxima, 4.759 ganaderos de ovino recibirán anticipos del 75 % del importe de las ayudas asociadas a estos sectores por importe de 17,2 millones de euros. El importe unitario establecido para el pago de este anticipo ha sido de 11,60 euros por oveja.
Ayudas a las explotaciones ovinas y caprinas con dificultades de comercialización de corderos y cabritos por la COVID-19
Esta medida se articulaba con un pago a tanto alzado por oveja o cabra afectada por la situación sobrevenida por la declaración del estado de alarma, y por ello la ayuda consiste en un pago complementario a las ayudas asociadas al sector ovino y caprino, habiéndose previsto un importe total de 4,3 millones de euros. De esa cantidad, 2,4 millones de euros corresponden a los Presupuestos Generales de la Comunidad de Castilla y León para el año 2020 y 1,9 millones de euros son con cargo al presupuesto del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación.
La diferencia que hay entre el importe previsto y el concedido (4,1 millones de euros) corresponde a los expedientes que en principio no han cumplido con los requisitos previstos.
La cuantía máxima de la ayuda no podrá superar los 12 euros por oveja o cabra elegible de cada explotación, consideradas todas las fuentes de financiación, con un máximo de 100 animales por titular de explotación que reúna los requisitos para ser considerado beneficiario.
Medidas de agroambiente y clima, financiadas por el Feader
Serán más de 10.000 los beneficiarios que tiene suscrito contratos de medidas agroambientales, agricultura ecológica o solicitan la ayuda a las explotaciones en zonas de montaña los que recibirán el anticipo por un importe de 18,1 millones de euros.
Además, en las próximas semanas y antes de finalizar el año, se seguirán ejecutando pagos de las diferentes medidas de las medidas del Programa de Desarrollo Rural (PDR) correspondientes a las medidas antes citadas, hasta alcanzar un importe estimado cercano a 45 millones de euros.
Estas medidas están cofinanciadas por fondos agrícolas de desarrollo rural de la Unión Europea, la Junta de Castilla y León y el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación.
Para ello, los agricultores firman un contrato en el que se comprometen a realizar determinadas acciones con beneficios sobre el medio ambiente y/o clima, asumiendo la realización de compromisos más exigentes respecto de las buenas prácticas de cultivo o de manejo de pastos consideradas normales, por lo que perciben un importe que varía en función de cada línea de ayuda.