Este fin de semana se han adelantado los relojes y, al margen del debate sobre el supuesto ahorro energético que conlleva, APAG Extremadura Asaja ha vuelto a recordar que se trata de una medida administrativa que afecta a la actividad en el campo, de forma especial a la ganadería.
La organización se muestra “totalmente en contra” de los continuos cambios horarios y defiende que se mantenga fijo el horario de invierno, tal y como propuso la Comisión Europea hace meses.
Desde la asociación siempre se ha considerado perjudicial el cambio de hora para el campo. El horario de invierno siempre es más ajustado al ciclo de la noche y el día, ya que el verano cuenta con un desfase de dos horas que afecta mucho a las labores agroganaderas.
Hay ciertas labores en el campo, como puede ser el ordeño, que no entienden de relojes ni de cambios de hora, sino que atienden a otras cuestiones, por lo que el horario de verano supone una disminución en el tiempo existente para aprovechar horas de trabajo, lo que se traduce en más costes.
Por estos motivos, la organización solicita a las autoridades que dejen de realizar estos cambios horarios y se mantenga fijo el horario de invierno que acabamos de abandonar.