Ricardo Ortega
Castilla y León lleva ya varias semanas recogiendo patatas de media estación, como la variedad Colomba. Es patata con buena sanidad y con calidad, además de con buenos rendimientos por hectárea.
Estamos ante un escenario favorable, especialmente si tenemos en cuenta que en zonas productoras, más al sur, se han llegado a recoger 15 toneladas por hectárea.
A todo ello cabe añadir que este mes de julio “el consumo se está portando bien”, apunta Juan Manuel Coello, director de Operaciones Patatas Meléndez.
La compañía comenzó el arranque el 4 de julio y ya ha sacado el 70% de la Colomba que habían plantado sus socios.
“En la próxima semana remataremos esta variedad y comenzaremos con otras que se dirigen al mismo segmento del mercado, como Ambra o Lucinda”, apunta Coello.
En todos los casos son variedades polivalentes, con buena demanda, de piel blanca y carne amarilla clara.
Tanto los agricultores que han contratado como los que trabajan por libre están cubriendo sus gastos de producción, teniendo rentabilidad.
Este año la compañía ha contratado más de 1.500 hectáreas en Castilla y León, pero no finaliza el proceso de búsqueda de nuevos productores que deseen trabajar según sus parámetros.
“Necesitamos agricultores que apuesten por el producto, igual que necesitamos un apoyo institucional que fomente el consumo de patata”, recalca Coello, “puesto que sería preocupante que siguiera cayendo, cuando hemos visto que el tubérculo es un producto asequible, saludable y que no tiene muchas calorías, a pesar de los tópicos”.
“Estamos ante un producto de primera necesidad que es próximo, que siempre está ahí, y al que recurre mucha gente cuando vienen mal dadas; pero es un gran alimento en todas las circunstancias y para todo tipo de público”, recalca.